A lo largo de varios textos de este espacio he argumentado que las Juntas de Conciliación y Arbitraje podrían estar brindando algunos de sus servicios en línea. La reticencia para hacerlo, sin embargo, es mayúscula. Y no es para menos: una revisión de los sitios web de las Juntas Locales y Federal del país muestran un desdén casi absoluto por tender puentes con la ciudadanía y usuarios mediante sitios amigables y, sobre todo, útiles. A continuación hago un repaso rápido por las páginas electrónicas oficiales (es decir, albergada en dominios “.gob”) de las Juntas para evidenciar lo que señalo:
I. Las inexistentes.
En este caso las Juntas no tienen siquiera página propia o no es accesible. Tenemos así a Baja California Sur, Colima, Puebla, Durango (en donde se afirma que es posible ya presentar una demanda laboral por medios electrónicos, pero ésta no abre al momento de publicar este texto), Tabasco e Hidalgo (en donde existe un formato electrónico para interponer quejas en la Procuraduría del Trabajo, pero no se puede encontrar una página propia de la Junta y sus servicios, o al menos no tan fácilmente como el rostro del omnipresente gobernador).
II. Las que parecen “sección amarilla”.
Antes del internet, si uno quería buscar un negocio o el teléfono de alguna dependencia de gobierno tenía que buscar en la llamada “sección amarilla”, una porción de un directorio proporcionado por la propia compañía telefónica que era un libro enorme con hojas delgadas como de biblia. Los datos eran mínimos: nombre del negocio, dirección y teléfono, además de que algunos podían pagar por insertar sus logos o ciertos diseños llamativos.
A semejanza de esa sección amarilla, las Juntas Locales de Coahuila, Tamaulipas, Veracruz, Nayarit, Tlaxcala, Morelos y Zacatecas solo contienen direcciones y/o teléfonos, si acaso algún directorio. Finalmente, la Junta de Sinaloa no llega siquiera a esto, pues solo contiene su “misión, visión y valores”.
III. Las que dan la finta.
En estos casos, las Juntas parecen contener información más relevante que su sola presentación, pero al examinarlas más de cerca se puede apreciar que ese contenido es mero relleno. Así, por ejemplo, la Junta de Aguascalientes se limita a transcribir la ley para explicar qué es un procedimiento ordinario o un contrato de trabajo. En su sección de “consulta en línea” aparecen links a las versiones públicas de sus laudos, pero los enlaces no sirven.
La Junta de Chihuahua tiene servicios añadidos como la “consulta de expedientes en línea” y la “agenda de diligencias” actuariales, pero no se puede acceder a ellos (quizá sea mi incompetencia, no podría asegurarlo).
En similar situación se encuentran las Juntas de Nuevo León, Campeche y Yucatán.
IV. Las olvidadas.
Hay otras páginas que en algún momento intentaron brindar servicios de utilidad para los usuarios pero que no le dieron seguimiento a esos impulsos iniciales y ahora solo contienen información desactualizada. Por ejemplo, el sitio de la Junta Local de Baja California tiene un Boletín Laboral que llega hasta 2018, una sección de “noticias” con novedades del 2016 y una “revista virtual” con menos textos que este blog.
En el caso de las Juntas Locales de Guerrero, montaron un sistema de información sobre expedientes electrónicos y notificaciones por lista (entre otros) que dejaron de actualizar en… 2014.
V. Las “peor es nada”.
La Junta Local de Sonora cuenta con el servicio en línea del boletín laboral, pero nada más, y casi lo mismo ocurre con las Juntas del Estado de México, tanto Toluca como Cuautitlán-Texcoco, quienes también cuentan con otras informaciones, pero poco útiles para los usuarios en general. La Junta de Michoacán también cuenta con el servicio de poder ver los acuerdos dictados en línea (almacenados en un google drive, por cierto) y anuncia ya que están creando una plataforma para agendar citas en línea “para la ratificación de convenios fuera de juicio”; inevitablemente, uno se pregunta porqué no mejor usan ya un teléfono o un correo para agendar esos convenios, pues no hay necesidad de esperar a generar una plataforma exclusiva para una función tan básica.
Por su parte, la Junta Local de Oaxaca tiene la particularidad de contar con versiones públicas de algunos laudos, aunque curiosamente solo tiene los archivos de 13 laudos en el periodo de octubre a diciembre de 2019 (sin que haya ninguna explicación del porqué tan reducido número); por otro lado, tiene un listado de “servicios” (como “procedimiento laboral ordinario y especial”) que seguramente no le dicen nada a un ciudadano.
Por otro lado, la Junta de Chiapas cuenta con un apartado de “servicios” en donde refieren lo que los usuarios pueden presentar (demandas, convenios, tomas de nota, etc.) con una breve explicación y orientación.
(continuará…)
[Publicado originalmente el 02 de junio de 2020 aquí]